Soy yo, tu vecino el Corazón. Por mucho tiempo pensé que era dueño y señor de todo cuanto acontecía en tu salón, pero ya veo que no, algo me está pasando desde que tu casa está vacía, enmarañada, retorcida, revuelta y con evidentes signos de desorden. Se terminaron las tertulias en tu habitación y siento que he comenzado a envejecer. Confieso que me creía fuerte y seguro aquí en mi pequeño apartamento, pero veo que no. Siento que los pilares y el tejado de mi fuerte morada se desploman y me estoy quedando sin aire. Aquellas sonrisas que me llenaban del más puro oxígeno han desaparecido y sin ellas, mis fuerza son cada vez más imperceptible. El brillo que había en tus ojos me llenaba de luz y tras cada inspiración que escuchaba, mis músculos tenían toda la energía del mundo concentrada en los latidos. Algo está pasando ahí en lo alto y no logro averiguar que es.
Antes cantabas. Tu voz marcaba el ritmo de mis pasos. Mi casa era una especie de tambor indio que hacía...tumtum...tumtum, pero algo enmudeció ese canto de sirena enamorada y ahora estoy flotando , tratando de sobrevivir en este mar de olas rojas que yace remanso sin fluir, porque le falta ese impulso que no has querido dar desde que estas tan pensativa y callada.
Mente, ahora comprendo que no soy el centro de este universo en el que habitamos tú y yo, te pido ayudes a este viejo y agotado corazón. Anoche mientras dormías, me enteré de todo, tu sueño fue la clave y encontré las respuestas a todas mis preguntas. Claro! Mente ha dejado de estar acompañada otra vez. Tus pensamientos vagan perdidos en el recuerdo, agarrados a un pasado reciente que ha dejado de existir y empeñada en rescatar aquello que nos hacía tan feliz... Yo era tan vital, tan fuerte y todo porque tú estabas feliz y enamorada. Hacías cosas que yo no entendía, pero te empeñaste en seguir y el abismo ha sido más profundo de lo que esperabas. Pero no te aflijas mi tozuda Mente, parece mentira que olvidaras tu primera vez cuando pensabas que el mundo estaba a nuestros pies y luego salimos arrastrados, destrozados y con las esperanzas perdidas, estaba todo oscuro y confuso, pero encontramos la salida y sobrevivimos.
"Ha vuelto a pasar, pero no te preocupes, lo importante es que ahora ya sabemos el camino."
Corazón.
-.Emnis
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